Vamos a indagar un poquito más en esto del método grow y cómo ponerlo en práctica, cómo utilizarlo para que puedas plasmar tu negocio. La semana anterior te dejé una tarea en la que te propuse que redactases cómo sería un día normal y corriente en esa vida futura en la que tú has puesto en marcha ese proyecto. Ya estás entregándole al mundo eso que tú solamente posees y que lo vivieses de alguna forma. Eso te va a ayudar a marcar el camino o la ruta, es como indicarle al GPS un poquito hacia donde quieres ir, junto con la visualización que hicimos. Y esa cartita, yo creo que ya has vivido un poquito, ya tienes esa sensación de “mmmm, ahí es por ahí”. Es bueno, pues hoy vamos a profundizar un poquito en eso, antes de que empecemos un poco con el tema del objetivo en sí, que es la primera parte del modelo grow.
Para entender un poco a grandes rasgos en qué consiste el modelo grow, debemos explicar un poco qué es el método. Grow es un acrónimo en inglés que significa: Goal, Reality, Options y Will, que traducido al castellano significa objetivo, realidad, opciones y hoja de ruta a seguir, plan de acción o intención. Esas cuatro fases son las que vamos a ir explorando. Vamos a empezar por el objetivo, continuaremos por la realidad, que es un poco explorar en qué momento actual y en qué situación se encuentra tu proyecto, sin preocuparnos en lo que fue ni preocuparnos en lo que será, sino qué tienes hoy sobre las manos que tienes hoy para trabajar, qué tienes hoy para poner en marcha. Luego está la parte de las opciones, que es la parte en la que se explora qué alternativas, qué recursos, qué posibilidades se presentan o se presentarían para poder poner en marcha, qué dispones, qué opciones dispones.
Esta parte es importante. Ya lo veremos más adelante, es importante que no haya filtros, que sea a casco por todo lo que se te ocurra. Porque muchas veces las ideas más locas son las más interesantes, son justamente aquellas en las que nunca te habías fijado, son los caminos que nunca habías contemplado. Así que eso es muy importante, que en opciones te dejes llevar, y luego simplemente trazar el plan de acciones, como la ruta a seguir para alcanzar el objetivo, los sitios que hay que ir marcando previamente y pasando por ellos para ir logrando el objetivo. La palabra de hoy es objetivo, vamos a empezar por la “g” de grow, por el objetivo.
Me gusta profundizar en el objetivo y no quedarme en un objetivo banal. Me explico, por ejemplo, cuando yo le pregunto a alguien qué quiere conseguir, siempre vienen con un objetivo concreto. Por ejemplo, quiero perder 20 kilos de peso, vale, bien, eso puede ser un objetivo, está bien porque es medible, es muy interesante, esto lo iremos viendo más adelante, pero es un objetivo banal, superficial, que te va a dar un poco de impulso inicial, pero que no va a ser la gasolina necesaria para que puedas hacer el recorrido completo.
Si quiero perder 20 kilos, pero necesitas un “para qué”, necesitas que esos 20 kilos tengan una profundidad, tengan un propósito más allá de la simple pérdida de peso.
Identificar la razón detrás de tu objetivo de pérdida de peso puede ayudarte a mantenerte motivado/a y enfocado/a a medida que trabajas hacia tu meta. Recuerda, la pérdida de peso no es solo sobre el número en la balanza, es sobre mejorar tu calidad de vida y alcanzar una versión más saludable y feliz de ti mismo/a.